¡Qué alegría ser hijos de Dios! Conmovidos y agradecidos compartimos el bautismo de los residentes del Hogar San José de Ancud. En esta celebración participaron 40 hombres y mujeres con discapacidad mental severa que son acogidos para que puedan alcanzar la integración en la comunidad, y así tener una vida más autónoma y feliz.