Un hito histórico para la comunidad educativa
El Colegio San Vicente de Paul de Puerto Octay vivió una jornada emotiva y significativa con la entronización y bendición de la imagen de su patrono, San Vicente de Paul. Tras 26 años desde la fundación del colegio, la comunidad celebró con alegría este momento esperado, que simboliza no solo la presencia espiritual del santo, sino también la consolidación de su legado en la vida escolar diaria. La ceremonia coincidió con el inicio del año académico, sumando aún más valor simbólico al encuentro.
San Vicente como guía e inspiración diaria
Ubicada en el acceso principal del colegio, la imagen de San Vicente de Paul dará la bienvenida cada día a estudiantes, familias, docentes y colaboradores. El acto fue acompañado por representantes de la oficina central de la Fundación San Vicente de Paul en Chile, quienes destacaron la importancia de fortalecer el vínculo entre la espiritualidad vicentina y la formación integral de los alumnos.
Un legado que se vive y se proyecta
La comunidad escolar reafirmó su compromiso con los valores vicentinos, especialmente con la caridad auténtica y el amor al prójimo, pilares fundamentales del proyecto educativo. Esta entronización marca un nuevo capítulo para el colegio, fortaleciendo su identidad católica y renovando la misión de formar personas solidarias, comprometidas y con sentido trascendente.